Sabina, ¡macho!

Imaginen a un tipo que ha crecido escuchando a Joaquín Sabina, pero escuchándolo de verdad, usando las letras de sus canciones como una guía para no perderse en la vida.

Un día, a sus treinta y pocos años, mientras vive en Nueva York, una ciudad donde encontrarse a Sabina podía parecer improbable, sale a un bar en el Lower East Side y se encuentra en la calle al mismísimo Joaquín Sabina. El hombre queda en tal estado de estupefacción que solo atina a decirle cuánto lo admira y a pedirle una foto.

Escribe un mail donde lo cuenta todo, su estado, su euforia, su descreimiento.
Luego, a los días, lanza esta reflexión muy ADN:

Por "Mendo"

Los que me conoceis bien... sabeis lo que ha significado para mí concocer a Sabina, aunque fuera por unos minutos de mi vida... y siempre me arrepentiré de no habérseme ocurrido invitarle a "un trago"...

Ale, hermano, tú mejor que nadie me entiendes... ese Aeroclub con el casette del disco de Hotel dulce hotel, 24 horas al día... esas horas y horas sentados en el bordillo de la piscina del río grande los dos allí...cantando canciones de Sabina... (que pensaría la gente...y ¡qué más da!) ese primer concierto de Sabina en el parque del prado quedará grabado en mi memoria... llegar a casa con la camiseta de Sabina puesta... Los dos allí en la Plaza de mayo en Buenos Aires cantando Con la frente marchita...cuántas horas habré pasado con el corazón roto consolándome en las letras de Sabina cuando alguna de esas "aves de paso" me rompió el corazón... Mi padre, con toda la paciencia el mundo, ayudándome a escribir la letra de Pacto entre caballeros (yo tendría 12 añitos) para así poder aprendérmela... Ese finde en Almeria antes de mudarme a esta loca ciudad, donde vi mi último concierto (de momento espero) de este crack...

Me pregunto cómo alguien que ni siquiera conoces puede influir tanto en ti... No recuerdo una etapa de mi vida sin estar relacionada con una cancion de Sabina... puedo asociar cada uno de sus discos a un momento de mi vida... Hotel dulce hotel: Aeroclub... Sabina & Cia.: Silvia... Mandrágora: Ale y Alameda... El hombre del traje gris: Suso y El turina... y así puedo seguir... y es que su música lleva incrustrada en mi cabeza desde que tengo 8 ó 9 años... cuando en el Aeroclub, junto con mi hermano adoptado Ale, Conocí a este genio y figura...

A veces pienso qué pasará cuando muera... y cómo echaré de menos seguir asociando el resto de mi vida... que espero le quede más recorrido que a la suya... a sus nuevas canciones...

No me mal interpreteis... no quiero un hijo suyo... lo admiro como artista... y como GENIO que es... como persona no entro a valorarlo, pues no me interesa... él es Sabina... Joaquín Sabina... la persona que me ha hecho disfrutar desde que tengo 8 años con sus OBRAS DE ARTE... algunas mejores... algunas peores... pero obras de arte... la persona que ha escrito cosas como: "este pez ya no muere por tu boca |
este loco se va con otra loca | estos ojos no lloran más por ti" que yo me decía una y otra vez cuando Silvia me dejó... u otras como: "lo atroz de la pasión es cuando pasa | cuando al punto final de los finales no le siguen dos puntos suspensivos", que me explicaba a mi manera lo que había pasado entre Marisa y yo...y así podría pasarme el día entero...

En definitiva.... ¡GRACIAS SABINA!