A vuelapluma – El Niño Jesús

Hace años que sospecho quién es el Niño Jesús. Yo tenía tres años y la noche del 24 me quedé despierta hasta la madrugada y vi cuando mi papá ponía los juguetes debajo de la cama y salía luego calladito. Le conté a mi hermana y ella dijo que no, que imposible, que ella ha tratado de verlo muchas veces, porque ella es mayor que yo, y que nunca, nunca, nunca ha visto nada, que a lo mejor el Niño Jesús le pidió el favor a mi papá que pusiera los regalos debajo de la cama porque tenía que ir a entregarle regalos a muchos niños, y que a lo mejor es así como lo logra, porque si no, cómo.

De eso han pasado tres años y todavía tengo mis sospechas. Ya mi hermana no insiste con la misma seguridad, la veo dudar. El año pasado estuve a punto de creer totalmente de nuevo en el Niño Jesús. Estábamos en casa de mi abuela y Mora empieza a decir que ahí arriba, en el cielo hay una luz azul, que si no la veo, que es el Niño que está entregando los regalos. La verdad es que yo nunca veo nada de lo que me están mostrando ni en el cielo, ni en las carreteras, ni en ninguna parte, pero para no ser menos le digo que sí, que la veo, que allá está, una luz azul, bellísima, grandota, como una estrella gigante, y Mora que llora de la risa, y como siempre yo creo que llora de la emoción. Pero esta vez no se aguantó y se echó a reír tan duro que tenía que ser muy tonta para no darme cuenta de que era mentira… una desilusión, porque esa me la hubiera tragado.

Este año mi hermana y yo tenemos planeado desenmascarar al que se la hace pasar por Niño Jesús. Vamos a buscar por toda la casa a ver si encontramos los regalos y así ya sabremos de una vez y para siempre que no tenemos que portarnos taaan bien para que nos traigan los regalos que queremos. Ya les contaré.